jueves, 9 de agosto de 2012

En tu cloaca.........................

Segunda parte
Dice Antincrista Antidolor que TiketMaster es una empresa súmamente despreciable.

PRIMER ACTO: ArcadeFire, Palacio de los Deportes, la pareja de enfrente no deja de besarse, es él quien está de empalagoso, los vendedores, los jóvenes recién desempacados de la adolescencia, con la preocupación de haberse puesto los tenis correctos, el suficiente gel. Tiempo. Más tiempo. El grupo abridor toca sólo una canción que vale la pena. Más de las 9 de la noche. El novio de adelante pregunta a esta paciente servidora si después de ese grupo ya empieza el concierto. Respondo que si. el novio impaciente voltea para los lados al tiempo que dice: ¡puta, de haber sabido ni vengo! La novia, incómoda, se hace la que no lo oye. El novio la abraza poniendose encimoso y la comienza a besar, quiere fajar, pero la novia, incómoda, quiere ver el grupo abridor, quiere escuchar el concierto. Quiere escuchar a la banda de jovenzuelos virtuosos de la sonoridad, la banda cuyos integrantes son la mitad ateos y la otra mitad protestantes (canadienses al fin y al cabo).
Los chamacos que sólo necesitan música para drogarse. A wilson.

Sale la banda y toca, vuelve loca a la audiencia. Una hora tocan y en este momento el novio mamón jala a la novia, incómoda, para que salgan y se vayan. La novia trata de soltarse la mano, pero el novio mamón se pone necio y consigue llevársela diciéndole: ni creas que me voy a quedar, ya llevo más de una hora y esto no se acaba... La novia, enfurecida -e incomprendida-, sale obediente y pendejamente del recinto. El grupo sigue tocado canciones que siguen prendiendo a la banda.

SEGUNDO ACTO: Teatro Metropolitan, concierto de reunión de los PIXIES, asientos hasta la última fila, no, la penúltima fila. La emoción, el ansia con adrenalina, latidos vivos del corazón, el público selecto, ¿selecto?, no, no tan selecto, hay colados y coladas. Concierto de poca madre, calor, sudores, humo, cervezas, en fin, son los Pixies, buen sonido, calor, más calor, canción tras canción, el disco completo. Al fina: una novia, pendeja, abre la boca y eructa su apreciación del concierto: ay, pero no vuelvo a estar hasta atras, todo el calor se subía, y además sonaba horrible, el Metropolitan suena horrible. Silencio.

TiketMaster es el nomo de la ramera universal: el dinero que todo lo compra y todo lo pone a venta. No es nada nuevo, hace siglos que la vida humana toda comenzó a mercantilizarse, las tierras poco importaron si fueron sagradas, se vendieron. Las ideas, ahora se llama derecho de autor. Formas abstractas y complejas como el matrimonio, también tienen un precio. Las personas, esclavitud moderna. Y el arte, no quedó fuera, todas las manifestaciones artísiticas pasan por el vulgar puente del dinero. Todo cuesta.

La ramera universal abre sus piernas a todo aquel que paga el precio, como el novio mamón y la novia pendeja, que nada debían de hacer ahí, pero el dinero no distingue credos, razas, creencias políticas o preferencias sexuales, tampoco distingue coheficientes intelectuales, cualquier ser humano puede estar en un concierto que debería de estar asegurado para los apasionados, para los mordidos por la pasión. Se cuelan.

PASIÓN: del verbo nomeimportanadamásqueesoylloroporesocuandonolotengoycuandosilotengo.









No hay comentarios: